Capítulo Cinco: Salvación y Sospechas

Momento del contra-ataque

Noa estaba en el hangar, justo frente al pelican, miraba a los marines, estaban preparando sus armas, parecían muy seguros de una victoria rápida, posiblemente porque veían a Caos, que inspeccionaba las armas de un armero portatil, parecía judgarlas, o preguntarse si algún día serían utilizadas contra los suyos, Volvió a sus asuntos en cuanto vio acercarse a uno de los marines, tenía una mirada seria, pero parecía algo cansado.

-Señor.-Dijo con un tono casi curioso, mirando al nomath de reojo.-Mis compañeros y yo no estamos seguros de que sea bueno tener a un E.T aquí, con nuestras armas.-Dijo con nu tono preocupado.

-No te preocupes, lo he visto en acción, y si quisiera matarnos, ya lo habría hecho.-Dijo con un tono tranquilizador, que alegró al soldado, a pesar del contenido de su mensaje.

Entonces se levantó, tenía una extraña sensación en la boca del estómago, había oido hablar de ella, la llamaban mareo de llegada, al parecer surgía en algunas personas momentos antes de la desaceleración de una nave cuando salía de slipspace, momentos después sonó la megafonía.

-Atención, desaceleración en territorio adverso, embarcad en los pelicans y prepraraos para un descenso.-Dijo una voz por megafonía,el Spartan tomó su rifle de asalto y se internó en el pelican, los marines hicieron lo propio, al igual que el nomath, de quien los soldados intentaban apartarse, mirando las cuchillas de sus brazos con gran inquietud.

El despegue fue tenso, Noa recordó en ese momento lo desacostumbrado que estaba a la guerra para ser un spartan, uno de esos supersoldados invencibles capaces de acabar con decenas de enemigos solos, pero el se suponía que era un modelo de prueba, o eso recordaba vagamente decir a los científicos que le examinaban cuando creían que le habían sedado lo suficiente.

-Parece que esto va a ser movido.-Dijo uno de los marines cuando el pelican tembló.-Seguro que deben de estar pegandonos una paliza ahora mismo, como hicieron en Nueva Irlanda.-Dijo a continuación.

-Esto no es Nueva Irlanda.-Le replicó el sargento de su pelotón.-Aquí no contamos con un ejército.-Contestó, pareció un intento de alegrar el ambiente, consiguiendo sacarle una sonris a un par de marines.

-¿Qué sucedió en esa Nueva Irlanda?-Preguntó Caos con un tono neutro e interesado al mismo tiempo.

-Veras..-Dijo el sargento, aclarándose la voz.-Nueva Irlanda era una ciudad de una de nuestras colonias, la conseguimos establecer poco antes de que esos Covenant llegaran, por lo que la fortificamos lo mejor que pudimos, tuvimos que defendernos, pero las defensas que teníamos eran una mierda, aunque teníamos a muchos marines con nosotros, pero solo pudimos aguantar hasta que nos evacuaron, entonces comenzaron a cristalizar el planeta.-Dijo con un tono cada vez mas serio.-Perdimos a mucho, tendríamos que haber enviado una flota contra esos mamones, haber atacado de una vez.-Dijo, terminando de hablar cuando comenzó a hacerlo el piloto.

-A los de ahí atrás, vamos a entrar en uno de los satélites de investigación para asegurarlo si es defendible.-Dijo, la aeronave giró bruscamente a la derecha.-Voy a aterrizar, volveré ppara recogeros dentro de unas dos horas, espero que os subaís todos.-Dijo, la nave volvió a temblar y se abrió la compuerta, mostrando un inmenso hangar de color violeta, en él habían restos de phantoms y cadávers esparcidos.

El grupo bajó y se puso en formación defensiva, listos para lo que fuera.

-Bien.-Dijo el spartan, que miraba a su alrededor.-Thomson, tu y tu equipo quedaos aquí por si vienen algunos cabrones, el resto, buscad la sala del control de seguridad, Caos y yo iremos hacia los laboratorios.

Noa caminaba por los pasillos curvilineos, no estaba acostumbrado a esa forma de construir que tanía el Covenant, y que al parecer los élites y los Separatistas compartían.

-Parece que nos tendremos que separar.-Dijo Caos, que miraba a un cruce de dos pasillos.-Espero que consigas realizar tu parte de la misión, y me ocuparé de la mía.-Cooncluyó, activando su modo de camuflaje.Había desaparecido antes de que el spartan pudiera contestarle.

Caminó por el pasillo, no había signos de resistencia, y no sabía si eso era bueno o malo, a judgar por como estaba el hangar,pero al escuchar a dos personas hablar, supo que podría conocer su respuesta.

-Creo que deberíamos asegurar el hangar, el equipo de soldados podría ir a comprobar como va la cosa.-Dijo un hombre de voz ronca, parecía ser uno de los defensores.

-No te preocupes tanto, los soldados ya estarán pensando algo, son unos cabrones muy fuertes.-Le contestó el otro.-¿No recuerdas como su jefe se cargó a ese hunter encabronado?

-Si, spungo que podemos estar seguros mientras siga por aquí.-Dijo, dejando claro a Noa que no eran hostiles, por lo que salió de su escondite, bajando su rifle de asalto.

Los soldados, dos marines de aspecto nervioso, miraron al spartan mientras bajaban sus pistolas, que acababan de utilizar para apuntarle.

-H..hola señor.-Dijo uno de ellos con voz nerviosa, que mostraba lo claramente sorprendido que estaba.

-Descanse soldado,¿Qué coño ha pasado aquí?-Contestó el spartan con tono autoritario, que vio apropiado para la situación.

-Dijeron que había llegado una flota Covenant, luego llegó un phantom de los nuestros y dejó a los soldados y se pusieron al mando, nos atacaron en ese momento, pero nos los cargamos, despues enviaron a casi todos los de seguridad al hangar para asegurarlo, luego...no supimos nada porque nos asignaron a vigilar estos putos pasillos.-Concluyó intentando parecer prfesional.

-Ya veo, decidme donde está el jefe de esta instalación, supongo que será el jefe del equipo militar que asignaron.-Dijo el spartan.

-Tiene razón, está en la sala de pruebas de aparatos fore, forerrr, lo siento, no sé como se pronuncia, pero está al final del pasillo, es una de las salas mas seguras, independiente en todo al sistema de seguridad principal, tiene blindajes y escudos por si había que sellarla en alguna prueba y además tiene sistema de mantenimient vital propio, es una nave dentro de otra nave.-Explicó el otro soldado, Noa les dió las gracias y se fue, dejando a los soldados con la labor que les dieron, ahora con mas confianza en sus posibilidades de salir vivos.

Llegó a la puerta de seguridad del laboratorio, estaba sellada completamente, tal y como el spartan esperaba, miró a su alrededor, encontrando varias cámaras que debían servir para observar  desde dentro a quien intentara entrar.

-Soy el spartan Noa 001, vengo como apoyo avanzado de la UNSC.-Dijo el spartan secamente, se le hacía extraño ser parte de las fuerzas spartan oficiales de la UNSC, sobre todo despuñes de lo que escuchó decir hace unos meses a la doctora Neyman, fue algo inquietante pero seguro que tras esta misión tendría tiempo de poder pensar en ello.

La puerta se abrió, y de ella salieron dos soldados élites con trajes de las fuerzas especiales, tenían carabinas de plasma, ignoraron al spartan y apuntaron al pasillo del que vino.

-Pasa humano, nosotros entraremos poco despues de tí.-Dijo uno de los élites, tras lo que el spartan hizo lo que le dijeron.

Noa se encontró con una inmensa sala, parecía un pequeño cuaartel general, viendo incluso un mapa holográfico con la situación de lo sucedido en tierra y el espacio por igual, habían  varios élites, la mayoría militares, otros llevaban ropajes de color arena con decoraciones de color tierra, debían ser los investigadores, también había varios científicos humanos con ellos.

-Parece que los elites son mas capaces que vosotros, humano.-Dijo la voz de Caos a través del comunicador, Noa se sobresaltó dentro de su traje, sin que ello fuera notado por los demás.

-¿Qué haces en mi armadura?-Preguntó por el sistema de commnicaciones cerrado de su armadura mientras caminaba por la zona.

-Llegué a la sala de control de seguridad antes que tus....marines, habían derivado los sistemas a una sala autónoma, en la que pareces estar, ahora voy a uno de los laboratorios públicos, según parece fue sellado por problemas de contención de un producto químico cuando la instalación fue atacada, cuando solucione ese error táctico me reuniré contigo y tus aliados.-Dijo mientras cortaba la comunicación.

-Vale.-Fue lo único que alcanzó a decir, respetaba a ese tipo, pero su personalidad le hacía querr pegarle un balazo o dos en la cara, aunque era dificil saber si la tenía, aunque el spartan casi sonríe pensando en la de balas que gastaría adivinando donde está.

-Debe de ser el lider del equipo de asalto que ha irrumpido en este satélite.-Dijo una voz a sus espaldas, el spartan se giró y vió a un élite de armadura azul que tenía un cierto aire de autoridad, debía ser el lider.

Así es, vengo como parte de los refuerzos terrestres, os ayudaremos a defender este mundo hasta que llegue la ayuda.-Contestó Noa.

-¿Ayuda?Dijeron que la flota mas cercana era de la UNSC y que tardaría un día y medio en llegar, de hecho, es casi un milagro que esteís tan pronto.-Dijo el oficial, para luego serenarse.-Lo lamento, he perdido la calma.-Dijo mientras adelantaba su mano, que el spartan estrechó.-Soy Sain ´Ketam, lider de este equipo, tenemos la misión de asegurar esta base de investigación hasta que recibamos refuerzos.-Informó el élite mientras le guiaba con la mano hacia un holomapa táctico que parecía estar mostrando como les iba a los suyos.

-Verá, tendremos apoyo extra, es algo dificil de explicar ahora mismo, pero supongo que en un rato será mas fácil.-Dijo el spartan, que se acercó al holomapa, que mostraba el intercambio de disparos entre un carguero de la UNSC que le acababa de transportar y un crucero del Covenant a la vez que del carguero salían verios puntos que debían ser pelicans o cazas, que se dirigían al planeta, tambían había intercambio de ataques entre naves enemigas y élites, aunque estas últimas estaban dañadas, tambien los había entre el enemigo y los dos satélites armados del planeta, aunque estaban a punto de destruir esas instalaciones defensivas en cualquier momento.

Quería seguir la conversación, pero el lider de los élites calló cuando un temblor inundó la instalación.

-¿Qué ha sido eso?-Preguntó con un tono autoritario.

-Una nave de abordaje, se ha clavado en la pared del cuadrante 8, sección de carga de instrumental.-Contestó un élite que observaba sin descanso el holomapa de la instalaión orbital.-También detecto unas reparaciones en la sala de refinamiento químico, parece que han arreglado la fuga.-Informó a continuación.

El élite miró durante unso momentos el mapa, para cambiár al sparta, y así durante unos segundos, hasta que se aclaró la voz, listo para dar sus órdenes.

-Quiero que un equipo me acompañe a repeler al enemigo, que los guardias de la UNSC y los marines de seguridad vayan al hangar.-Dijo, mirando al spartan, que ya estaba dando la orden.-Y tu con ellos.-Dijo a continuación, tomando por sorpresa a Noa.

-Debería quedarme a defender este sitio.-Contestó.-Si saben que estais defendiendo esto, os superarán muy pronto.-Dijo a ontinuación.

-Si, pero creo que tu ayuda será mas necesaria en la instalación del planeta.-Dijo el élite.-Hace dos horas empezamos a recibir interferencias, lo mas seguro es que solo estén rompiendo las comunicaciones, pero de todas formas allí habrán mas posibilidades de aguantar.-Contestó, el spartan había acabado deduciendo lo mismo, por lo que no pudo replicarle, tras lo que abandonó la sala corriendo, mientras veía a cuatro élites con rifles de plasma reunirse junto a su lider.

Noa corría por los pasillos, estaba empezando a escuchar algunos disparos, puede qie fueran de los dos tipos de antes, pero dejó de pensar en ello cuando vio a un escuadrón de grunts con un brute a la cabeza llegar al cruce de pasillos, por lo que, antes de que pudieran reacionar cogió una granada de fragmentación, la activó y la lanzó, cayendo a los pies del primero de los alienígenas en percatar su presencia, Noa agarró su rifle de asalto y disparó contra el grunt, que comenzó a disparar su spiker  cuando ya llevaba bloqueadas tres balas gracias a los escudos de su armadura, que se apagó cuando la granada explotó, junto a la vida de sus grunts, entonces Noa le disparó una ráfaga que pudo hundirse en él y abatirle.

Siguió avanzando, hasta escuchar un tiroteo intenso, en el que las armas de energía parecían predominar, aceleró cuando vió correr a un brute hacia la puerta de una sala con un lanzagranadas,  lo alcanzó, embistiéndole por la espalda cuando la puerta se abría automaticamente, haciéndole caer, amortiguando el impacto con el cuerpo del alienígena, para luego golpearle la nuca contra el suelo, y así poder dispara la última salva de balas que le quedaban en el cargador, pero cuando alzó la mirada, listo para recargar, se dió cuenta de que debería haber guardado esa munición cuando un martillo gravitatorio impactó en su casco, quebrando el visor y lanzándole contra la puerta de la que entró, estrellándose contra ella antes de que se abriera.

-Vaya, yo me esperaba un saludo mejor.-Dijo Noa, que tiraba su rifle de asalto y desenfundaba su magnum, que sostenía con su mano izquierda, mientras que activaba los escudos jackall de su muñeca derecha, preparándose para bloquear un golpe, que llegó justo cuando el escudo de la muñeca derecha del espartan terminó de materializarse, bloqueándolo y manteniendo la situación en un punto muerto.

-Esta defensa es ocurrente, Demonio, pero no creas que podrás derrotarme con tan poco.-Dijo el brute, que hizo uso de su fuerza para intentar romper el escudo, pero que tuvo que retroceder cuando Noa le disparó a quemarropa con su magnum, gastando todo el cargador.

-Pareces un tipo importante,¿eres quién comanda estas tropas?-Preguntó el spartan, sindo respondido por uns muca que debía ser una sonrisa brute.

-Si, soy el comandante de los ejércitos y flotas personales de mi señor, habeís tendo la suerte de que no viniera con una de sus flotas al completo o la batalla habría acabado hace mucho.-Dijo, mientras el spartan se acercaba al brute que abatió momentos antes.

-¿Entonces, eres un guardaespaldas de los profetas?-Preguntó el spartan, que pateó el cadaver  hasta hacerlo rodar.

-Solo de uno, pero eso ahora no importa, lo que importa es mi misión, y como obstáculo que eres, debería eliminarte, pero todavía no puedo.-Dijo el brute, desconcertando al spartan, tras lo que el alienígena desapareción, dejando solo una esfera metálica de aspecto extraño.

-Parece que tuviste un enfrentamiento pelirgoso antes de llegar.-Dijo Caos, que estaba apoyado contra el cadaver de un hunter, mirando como los marines establecían un perímetro hasta que el pelican llegara.

-Vosotros también, ¿Algo de que informar?

-Solo de tres bajas, tuvieron suerte de que pudiera flanquear a estas criaturas, la verdad es que son mas poderosas de lo que parecen.-Dijo mientras le daba unas palmadas al escudo del brazo del cadaver en el que se apoyaba, tras lo que se levantó.

-Me alegro de escucharlo, pero ahora tenemos algo de lo que ocuparnos.-Dijo mientras sacaba de un compartimento de su armadura la extraña esfera que había dejado su oponente al desaparecer, entregándosela a Caos para que la observara.

-Es un artefacto interesante, parece muy avanzado, dudo que estos enemigos a los que nos enfrentamos puderan fabricar algo así, aunque desconozco mucho de ellos.-Dijo, devolviéndole el artefacto al spartan.-Ahora debemos centrarnos en nuestro objetivo, según mis estimcaiones la flota de asalto X99 vendrá en unas horas.-Concluyó el nomath, tras lo que, minutos despues, se internaron en un recién llegado pelican.

Llegada a un lugar extraño

El pelican temblaba, Noa ya había visto los raspones del  blindaje que había sufrido por culpa de algun phantom o banshee enemiga, aunque por suerte estaba intacta, habían dejado la atmósfera exterior hace poco, ahora solo tenían que esperar y aterrizar en el lugar que tocara para apoyar a los defensores.

Un golpe sacudió la nave, tras lo que se escucharon fuertes explosiones del exterior.

-¿Qué sucede?Informen.-Dijo el spartan, que sujetaba el rifle de asalto que había conseguido en el pequeño armero del pelican.

-Naves enemigas, han inutilizado los motores, voy a aterrizar en un claro, si alguien sale de esta, que camine hacia el este durante unos kilómetros, recibo transmisiones aliadas de allí, puede que sea la base.-Anunció, todos se prepararon para el impacto.

El impacto fue brutal para los marines, que, aun con los arneses de seguridad puestos, notaron el golpe, hiriendo a la mayoría y matando a tres desafortunados, Caos y Noa no notaron el golpe así, pues los escudos de la armadura del spartan amortiguaron asi todo el golpe, al igual que el blindaje y los sistemas nanotecnológicos de reparación de Caos, que salieron por su propio pie, viendo, conforme salían los marines en mejor estado, que ya no podrían ayudar al piloto, que estaba su cabina, aplastada contra un montículo de piedra de aspcto muy sólido.

-Señor, hemos tenido bajas, y de los diez que quedamos, solo cuatro estan en plena forma para ayudar.-Informó el sargento Thomson, que se ajustaba el casco lo mejor que podía.

-Pues buscad una covertura para que puedan curarse, llevad allí todo lo que alla en el pelican, armas, municiones y suministros, mantened la posición hasta que llegue la ayuda aliada.-Informó.-Nosotros ayudaremos a los defensores.

Y ambos se alejaron del grupo, deseando que sus compañeros sobrevivieran

Caminaron por el terreno como podían, hasta que escucharon el ruido de una multitud, prepararon sus armas.

Se colocaron tras un montículo, entonces vieron lo que parecía ser una escena digna de una guerra abierta como aquella.Por un lado, estaban los defensores, estaban en una llanaura, en una estructura forerruner con varias torretas y fortificaciones, intentando detener a su enemigo, un gran ejército Covenant, que asediaba la instalación con artillería, procedente de sus vehículos y el trío de scarabs.

-La variedad de armas que poseen esos...... Covenant es bastante avanzada y capaz, me sorprende que vosotros aguantaraís solos contra ellos con vuestra tecnología.-Dijo Caos, Noa estuvo a punto de replicarle ese comentario, pero en su lugar preparó su arma y se tranquilizó.

-No te sorprendas, no somos tan poco avanzados como puedas creer, sabemos defendernos.-Dijo mientras miraba a su alrededor, buscando una ruta de descenso.